"No sentía como si hubiera ido físicamente, a alguna parte; era, más bien, como si hubiera despertado. Acaso me había despertado por fin de un mal sueño, y mi alma estaba conociendo ahora la verdadera magnificencia, y al hacerlo, se estaba expandiendo más allá de mi cuerpo y del mundo físico. Se extendía más y más hacia afuera, hasta que abarcó toda la existencia, aunque no se limitó a eso: continuó expandiéndose, adentrándose en otro ámbito más allá del tiempo y el espacio, pero sin dejar atrás el anterior, sino excluyéndolo todo. Amor, felicidad, éxtasis y asombro fueron los sentimientos que me llenaron, me traspasaron y me envolvieron. Me vi engullida y envuelta en más amor del que jamás pensé que pudiera existir. Me sentí más libre y más viva que nunca. Como he dicho, de ...
Es momento de brillar, descubre tu esencia creativa con Cecilia García Marco